Helado casero para perros

Este es nuestro primer verano con Sucre, nuestro primer verano con mascota. No es su primer verano porque nació en Mayo, pero hasta octubre como ya sabéis no llegó a nuestra vida porque estaba con otra familia. No sé cómo fue su verano como cachorro, pero sé como está siendo su verano con un año y pocos meses.

Estamos en el campo y aquí es feliz. Está en la terraza, baja al huerto, sube, pasea sin correa tranquilamente y está mucho mejor que en el piso de Valencia. Y aunque aquí está mucho mejor hay una cosa que es cierta, aquí hay muchas rampas, cuestas y escalones y el otro día tuvimos un susto, una experiencia que no quiero repetir.

Me preocupaba mucho el tema de los golpes de calor y ya sabéis que el Bulldog  Francés se caracteriza, entre otras cosas muy buenas, por fatigarse y no respirar con mucha facilidad. Por eso estos días de calor tanto en Valencia como aquí por el campo siempre salimos con su botella de agua bien fresquita (siempre la guardamos en la nevera y está lista para los paseos).

Un susto terrible 

El otro día hizo mucho bochorno aquí en el campo y estuvimos dentro de casa, pero claro tenía que salir a hacer sus necesidades y a las ocho y pico de la tarde decidimos ir a dar un paseo. En una de las rampas se fatigó, empezó a respirar muy mal y se tumbó en el suelo, no quería beber agua y no respondía. Pensábamos que se nos moría, le tiramos agua por encima del cuerpo y me lo llevé en brazos corriendo de vuelta a casa. Le puse el aire acondicionado y mojé una camiseta y escurrida se la coloqué sobre el cuerpo. Empezó a recuperarse y se tranquilizó. Pero el susto no nos lo quitó nadie.

Llevábamos agua fría, esperamos a que el sol no pegara fuerte… y aún así tuvimos un susto de muerte. Por eso os lo cuento, para que tengáis mucho cuidado y estéis pendientes de que vuestros perros siempre tengan agua fría, no salgan fuera en las horas de más calor y no den largas caminatas.

Cubitos de hielo con trocitos de fruta

Una de las cosas que le estamos haciendo para que juegue y se refresque es hacerle cubitos de hielo con trocitos de sandía dentro. Puedes ponerle cualquier trozo de fruta, simplemente tienes que pelarla, cortarla en trocitos y meterla en una cubitera, luego poner agua y dejar que se hagan los cubitos de hielo. Luego darle el hielo y veréis lo bien que se lo pasa chupando el hielo para sacar el trocito de fruta de dentro.

Por cierto, las sandías son de nuestro huerto, bueno mejor dicho el huerto de mi padre. Sandías, calabacines, melones, calabazas, pepinos... y no sé cuántas cosas más tiene en su huertito bonito. Del huerto a casa o como en este caso del huerto al congelador. Sucre encantado. 

¿Habéis tenido algún susto como el nuestro? ¿Cómo habéis o evitáis los golpes de calor en vuestras mascotas?

Yo estoy pensando comprar un par de productos para este tema, una camiseta y un collar refrigerado. Os dejo los enlaces por si queréis más información sobre este tema.

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