A principios de año publiqué un post con 7 ideas para cenar sin complicarnos mucho la vida. Recetas que haces al horno o a la plancha, sin manchar mucho y encima sanas, sanitas (bueno, vale, unas más que otras).
Pues hoy quiero hacer lo mismo pero con los desayunos. Tengo que confesar que antes era de tomarme un café con leche antes de empezar a trabajar (a eso de las 5:45 am), no tomar nada más hasta estar muertita de hambre sobre las 12 y pegarme un atracón de algo que terminaba siempre siendo algo poco saludable.
Ahora que pienso cada cosa que como y bebo, he cambiado mis hábitos. No hago dieta, como bien y eso sumado al ejercicio diario que realizo, lo estoy notando mucho y no sólo en mi cuerpo, también en la energía que tengo durante todo el día. Por eso me vale la pena parar cinco minutos a prepararme el desayuno.
Mi nueva rutina entre semana, que trabajo desde casa, consiste en levantarme a las 5:45, beber un poco de agua mientras se enciende el ordenador, ir al baño y ponerme a trabajar. No paro de trabajar hasta las 7 am. A las 7 más o menos me preparo el desayuno. Aquí llega la destreza para prepararlo rápido, pues no puedo perder ni un segundo. Mientras se calienta la leche en el micro, hago las tostadas o preparo la fruta, nada más está la leche pongo el café y listo. Vuelvo al despacho y desayuno mientras sigo trabajando (me encantaría poder parar y desayunar tranquilamente, pero es algo que no puedo permitirme). Cuando termino de desayunar me tengo que ir a lavar los dientes y volver a ponerme el aparato. Entonces aprovecho para peinarme y cambiarme las gafas por las lentillas.
Vuelvo a trabajar y ahora sí, con más energía. El café hace efecto y las tostadas y la pieza de fruta me dan tregua para el resto de mañana, si vuelvo a comer algo es sobre las 11 un puñadito de nueces. Los únicos días que como algo más son los jueves porque voy al gimnasio a las 14h. por lo tanto tengo que almorzar algo y tomarme otro café.
NOTA INFORMATIVA: estos desayunos no son ejemplo de nada, son solo una idea.
No quiero dar lecciones de nada, ni están incluidos en ninguna dieta.
Es lo que suelo desayunar cada día según lo que tengo en casa de fruta o lo que me apetece según el hambre que tenga o la actividad que realizaré durante el día.
Y por fin, llega el fin de semana y puedo hacerme un zumo de naranja natural, sentarme en la mesa mientras escucho música y leo las redes sociales. Comer tostadas con tranquilidad, incluso bajar a comprar pan o curasanes recién hechos. El placer del fin de semana.
Mañana sábado pienso desayunar... ¿Mmm qué podría desayunar?
¿Cuál es vuestra rutina para desayunar?
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